He empezado a acompañar como doula este año, aunque llevo siéndolo desde que tengo uso de razón. Porque el acompañamiento de este proceso se lleva dentro, a través del interés personal y la motivación, solo que a veces falta situarse y encontrar el lugar apropiado para desarrollarlo.
En ese sentido, me formé como historiadora desde una perspectiva de género y continué estudios académicos que no me llenaban por ser muy impersonales.
Tras la formación en FormaciónDoulas aprendí a poner muchos de los conocimientos que ya tenía en práctica y utilizar diversas herramientas para acompañar este maravilloso proceso. Así ofrecer sostén mediante el respeto y la consciencia, librándonos de prejuicios sociales, para descubrir la maternidad propia de cada persona.
Permitiendo a las madres y sus familias tener una mayor cobertura, tanto logística, informativa y emocional. Convirtiendo la experiencia en un suceso de momentos bonitos, cálidos y positivos.
Naturalmente tu cuerpo sabe parir y tu bebé sabe nacer, pero el acompañamiento, ya sea de forma presencial u online, reforzará tu confianza en ello y en la toma de decisiones. Además, sentirá la tranquilidad de que tienes al lado a alguien que te entiende y que unirá fuerzas contigo para que recorras el camino del mejor modo posible.